El movimiento deportivo avanza firme, organiza la casa y pasa revista a los temas relevantes
Por: Ing. Pedro Julio Quezada, Director de la Academia Olímpica Dominicana y presidente de la Federación Dominicana de Arte y Cultura.
Santo Domingo, D. N.
En tiempos de guerra o de paz, los griegos se reunían siempre durante años en el Altis que era el templo sagrado, la sede de los Juegos Olímpicos, y donde erigieron el santuario de Zeus. Sin importar la situación, al llegar los Juegos se establecía una tregua, que era respetada y a la que acudían todos a competir.
A principios del siglo pasado, específicamente en el año de 1920, el Barón Pierre de Coubertin al analizar los obstáculos que tenía de frente el movimiento olímpico en ese momento, y que se refleja en el movimiento olímpico de hoy, se refería a éste como “una maquinaria silenciosa, cuyas ruedas no rechinan y cuyo movimiento no cesa nunca, a pesar de los puñados de arena que algunos lanzan contra ella, con tanta perseverancia como falta de éxito, para impedir su funcionamiento”, cierro la cita.
Y es lo que está viviendo hoy día el deporte en la República Dominicana, que está siendo zarandeado por un sector que no alcanza a entender la trascendencia del movimiento al que ellos mismos pertenecen. Se han quedado en el deporte, sin entender que éste es sólo la “correa de transmisión” de algo más grande, de una filosofía de vida que ya trasciende del siglo en la modernidad, pero que existió desde etapas remotas de la Humanidad.
¿Es mucho pedir entender esto?
Dirigentes que se han olvidado de los principios y valores del olimpismo, de la buena gobernanza, de que la sociedad dominicana ha avanzado y cambiado para bien. De que en el deporte no se gobierna para sí, sino para beneficio de toda la sociedad y para los atletas, que son los verdaderos protagonistas que hacen visible la trascendencia del deporte, y que el deporte es un derecho constitucional y promueve el juego limpio.
Hace unos días el Comité Ejecutivo del Comité Olímpico Dominicano ha actuado suspendiendo por tres meses cinco federaciones deportivas nacionales. Ha escuchado a cada uno de los comités ejecutivos, a los presidentes de estas organizaciones. Previo a la sanción, ha habido un encuentro para que afloren los argumentos de una discusión abierta, transparente. Y luego de semanas se han tomado medidas. Es un derecho que le asiste al Comité Ejecutivo y que tiene precedentes.
Es justo decir que no son situaciones generadas de este año, ni del otro, son situaciones que vienen desde hace años en algunos de los casos, y que han trascendido a la opinión pública, y que algunas están en los tribunales de la República.
¿Alguien duda que era hora de actuar de manera responsable?
El Comité Olímpico Internacional enfrentó el boicot de Montreal de los Juegos Olímpicos del 1976. Conllevó que 24 países africanos no asistieran a la cita, 32 estados se sumaron incluyendo a China; sin embargo, el COI no aceptó las presiones políticas ni las pretensiones que planteaban los complotados. El resultado fue el fortalecimiento del movimiento olímpico internacional, que posteriormente también sobrevivió al boicot contra Moscú en los Juegos de 1980.
¿Cuál ha sido la clave del COI? Es que cuando ha llegado el momento de tomar decisiones en el seno del Comité Olímpico Internacional, sólo ha primado un solo interés y es el de preservar a la institución, sin preocuparse de otra cosa. Al COD le hemos confiado el destino de esta institución, confiamos en que allí todas las decisiones que se tomen sean para preservar su integridad y su legado.
El comité ejecutivo debe asumir su responsabilidad, mantenerse coherente, apegado a los principios, sin maltratos, con prudencia, pero firme.
Seguiré sobre el tema